lunes, marzo 22, 2010

El maple de mi casa...








El maple de mi casa cada vez que me asomo a la ventana se aguanta la respiración y se queda quietecito para que no me de cuenta que algo le pasa... pero si me doy... cuenta, digo... Y como no me voy a dar cuenta si mientras que al maple le salen cositas en las ramas a mi me estan saliendo también... ramas, digo... si señor! lee usted bien, me estan saliendo ramas... y no es que me importe pero si me soprende que de pronto una crezca así sin más... sin darse cuenta y de a poquito...

Así que cada que yo me asomo el maple contiene la respiración, para que no me de cuenta de lo que le pasa... y cuando yo lo veo mirándome por la ventana me aguanto la respiración y me quedo quietecita para que tampoco él se de cuenta de mis ramas...

Que tonto el maple que cree que no me doy cuenta de que él se da cuenta de que yo me doy cuenta de que algo le pasa... así de pronto... De mis ramas ni me apuro... me gustan y me sientan bien... podré colgar mi ropa a secar, vendrán los pájaros a descansar... y cuando me salgan hojas... me iré a dormir al maple y nadie podrá encontrarme...

Que bien que al maple algo le pase por fin...!

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